El gas natural vehicular es una opción para la industria de la automoción, que está inmersa en la búsqueda de soluciones eficientes y limpias. El gas natural licuado (GNL) y el gas natural comprimido (GNC) empiezan a ser un combustible valorado especialmente en el transporte profesional, lo que falta es una red de puntos donde repostar. Cumple con las más estrictas normas anticontaminación, repercutiendo de manera directa en la calidad del aire y del medio amiente además de repercutir de forma importante en el ahorro económico en el combustible.

Panero Logística ha apostado por un ambicioso proyecto en el que de momento abastece sus 20 nuevos vehículos (10 cabezas tractoras de IVECO Stralis 440 y 10 camiones Escania rígidos para el reparto regional con motores de frío Carrier) a través de una gasinera móvil ubicada en terreno del Matadero Central de Asturias. Los camiones utilizan GNL y GNC, que ofrecen a los vehículos una autonomía de 1.480 kilómetros y les permite volver a repostar a la base, ya que recorren en sus rutas el Noroeste de España. La inversión inicial de estos 20 vehículos ha ascendido a tres millones de euros.

“Va a ser el combustible del futuro”, así explica Cristina Sánchez el interés desde hace tiempo del Grupo Panero por conseguir la autorización e instalar una gasinera abierta al público que también abastecería su flota de camiones. Sería la primera con la que contaría el Principado de Asturias para abastecer al público en general, ya que Alimerka, empresa pionera en la región en la utilización de este combustible cuenta con una gasinera propia para abastecer a su flota. “Estamos a expensas de que el Ayuntamiento de Noreña solicite los informes correspondientes a Cultura, Sanidad y Medio Ambiente, esperamos que se solvente rápido y poder instalar la gasinera fija, por eso decidimos contratar con una gasinera móvil de forma provisional que cumple todos los requisitos legales para abastecer nuestros vehículos”, explica Cristina Sánchez.

El parque de vehículos del Grupo Panero cuenta con 194 vehículos entre ligeros y pesados, y su intención sería que en 2015 toda su flota utilizase el gas natural como combustible. “Además ahora hay subvenciones para ello, que aunque hace necesario presentar un proyecto pormenorizado resulta de ayuda a la hora de la adquisición de los vehículos, y aunque el importe de la adquisición es superior, tras la amortización que no sería superior a un par de años, puedes ahorrar hasta un 47% en combustible”, detalla Cristina Sánchez. “A modo de ejemplo podemos poner como referencia que el consumo de un coche desde el País Vasco hasta Asturias con gas licuado puede ascender a 7 euros”, explica.

La posibilidad de ofrecen en la región el primer punto de suministro de gas natural  vehicular abierto al público, favorecería la incorporación de flotas de otras empresas de transporte así como particulares al uso de este combustible para sus vehículos, “con lo que lo vemos beneficioso tanto para las Administraciones, las empresas o el ciudadano de a pie, ya que la falta de un trazado de puntos de recarga puede ser ahora mismo un grave problema a la hora de elegir el combustible del vehículo que podamos adquirir a corto plazo. La idea sería abrir al público cuanto antes”, afirma Cristina Sánchez.

Panero Logística está desarrollando ese proyecto de la mano de la empresa HAM, que es la que ha instalado la gasinera provisional para el abastecimiento de los camiones del grupo, y que además también abastece el punto de suministro de Alimerka.

A más largo plazo, el Grupo Panero y Serincar 92 SL, propietaria del Matadero Central de Asturias aprovecharían los residuos de gas mediante una gestión del boíl-off gas para el aprovechamiento en el sistema de calefacción y agua caliente de las instalaciones del macelo. “Realmente contamos con un proyecto integral para regenerar los residuos de gas natural y aprovecharlos en forma de energía en el Matadero Central de Asturias”, concreta Cristina Sánchez.