Al frente de Ganadería Adolfo se encuentra un único titular, Adolfo Braña Braña, que muy joven y por circunstancias de la vida, ya que su padre murió cuando tenía 12 años, apoyó a su madre y sus abuelos en la ganadería, su medio de vida en La Millariega. Con 60 vacas y más de 30 novillas gestiona su negocio autoabasteciéndose con lo que generan sus 40 hectáreas de terreno salvo el pienso. Es socio de Central Lechera Asturiana y la producción media de esta ganadería tinetense es de 32 litros por vaca y día.
-¿Cómo fueron los inicios?
-Ganadería Adolfo es una ganadería familiar, de las de toda la vida. A mí nunca me gustaron las vacas, pero cuando falleció mi padre ya empecé a ayudar a mi madre y mis abuelos ya que en casa había ganadería de leche. Poco a poco me fui involucrando más y hace 20 años se hizo la nave, ya era una necesidad porque teníamos las vacas en varias cuadras y de continuar necesitábamos una infraestructura para crecer y que facilitase el trabajo, se compró cuota láctea, lo que posteriormente fue una ruina, pero en aquel momento lo veías como un respaldo para el futuro, ya que podías venderla.
-¿Cómo gestiona la ganadería?
-Actualmente tengo 60 vacas, 20 secas y más de 30 novillas. Cuando tengo muchas novillas, un amigo en Conto (Navelgas) y otro en Otur las llevan hasta que están próximas al parto y luego las vuelvo a traer. La media de producción es de 31 o 32 litros por vaca y día de unas calidades del 4 de grasa y el 3,28 de proteína. Realmente solo compro pienso compuesto, ya que el resto de la alimentación de los animales se produce en la propia ganadería. Entrego la leche a Central Lechera Asturiana y me considero afortunado, porque es una empresa que apuesta con el precio.
-¿Qué sistema de ordeño utiliza?
–Tengo una sala de ordeño de 2 por 5, tiene 20 años pero no la modifiqué porque no ha dado ningún problema.
-¿Es capaz de llevar adelante los agrícolas solo?
-No subcontrato ningún trabajo, es la forma de conseguir rentabilidad, aunque el ahorro evidentemente sale del trabajo que conlleva en campaña de largas jornadas y cuento con todo tipo de maquinaria. Hace cinco años que dejé de sembrar el maíz precisamente por el trabajo y el tiempo, con lo que hago todo en bolas, tanto el silo de hierba natural como el de raigrás, y hierba seca para las ‘xatinas’. El silo tiende a ser más bien seco porque yo no lo meto en el carro mezclador con el pienso, solo meto hierba y silo, así no me obliga a darles el pienso a una hora fija, como estoy solo para mí es más cómodo hacerlo así. El pienso que utilizamos es el de Campoastur.
-Las vacas ¿salen al pasto?
-Aunque este año por cuestiones meteorológicas salieron poco, desde finales de abril en condiciones normales empiezan a salir al pasto. Antes las vacas de leche salían al pasto y subía su producción láctea, hoy no, salen al pasto y lo disfrutan porque están donde tienen que estar, pero la leche baja, cambió mucho la alimentación de los animales de hace 20 años a hoy.
-¿Cómo valora la situación del sector?
-La situación es complicada, el problema es que vendemos la leche por lo que nos dan y tenemos que comprar por lo que te piden. Las Administraciones en vez de echar un cable, cada poco tiempo parece que generan un problema para los ganaderos. Tú apuestas por entregar más leche, tener más vacas, pero llega un momento que tocas techo, y hay dos opciones, o aumentas o es inviable, los costes de todo son muy elevados, vas supliendo a base de incrementar animales, pero por ejemplo yo he llegado hasta aquí, pero más no puedo.
-¿Cómo ve el futuro?
-Nunca se sabe. Una posibilidad es que abandone, porque así no tienes calidad de vida, necesitas tener un día libre, y aunque hay sistema de sustituciones, hay que pagarlo. Si intentas vivir mejor, no sacas ningún beneficio. Otra opción es aumentar ganado, pero ahora mismo estacionado no puedo continuar mucho más tiempo, ya que luego dar el paso de crecer sería aún más difícil.
-¿Qué opina de la nueva normativa de los purines?
-Habrá que buscar una solución, nuevos sistemas, lo que haga falta. Las ganaderías se seguirán cerrando pero no por este tema en concreto.
-¿Cómo lleva su trabajo?
-Tengo mucha moral, no me da pereza, el horario es amplio, y si no cuentas con apoyo en el trabajo es complicado. Si tienes vacas lo más lógico es que te gusten, pero no es mi caso, eso sí, las cuido todo lo mejor que puedo, casi puedo decir que son antes ellas que yo.
