Ibias es un concejo de casi 1.500 habitantes. Limita con Galicia y León disfrutando de un entorno natural privilegiado gracias a su especial ubicación entre la Reserva Integral de Muniellos, el Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias y los Ancares leoneses. Conocido como ‘el Sol’ de Asturias es el municipio asturiano con  más horas de sol al año y disfruta de un microclima especial que favorece que se registren las temperaturas más altas de Asturias. La alcaldesa de Ibias, Silvia Méndez nos habla del municipio.

-¿Qué aporta el sector primario al municipio?

-El sector primario es y debe ser un pilar dentro de la estructura productiva y económica del concejo. Genera empleo y riqueza, contribuye a evitar el abandono del medio rural y ayuda a preservar el medio natural. La ganadería es de tipo familiar, esencialmente vacuno, ovino y porcino. El ganado vacuno es fundamentalmente de carne  que suele criarse la mayor parte del tiempo en los pastizales y brañas, por lo que resulta de una calidad excelente. En pueblos como Marentes además se está apostando fuertemente por la ganadería ecológica de calidad. La apicultura es otra actividad arraigada en Ibias que se está convirtiendo en motor económico, nuestra miel está siendo comercializada en toda España. La agricultura es de autoconsumo y dentro de este sector es indiscutible que podemos presumir de vinos. Estamos registrando un despunte en la producción de uva (cepas y emparrados) al estar incluidos en la DOP Vino de Calidad de Cangas y porque debido al clima y a las horas de sol, conseguimos la óptima maduración de la uva confiriéndole una calidad excepcional, es muy apreciado el verdín blanco.

-¿Ha afectado el cierre de la mina?

-La minería en Ibias ha sido la principal fuente de ingresos en el municipio y su cierre supuso un duro golpe para la economía de las familias ibienses y ha afectado seriamente a actividades como el comercio. Hay que reforzar el sector forestal, el agro ganadero y el turístico con el impulso de las ayudas que se están convocando del programa Leader 2014-2020 para la modernización y ampliación de actividades y la puesta en marcha de nuevas iniciativas y proyectos privados.

-¿Se mantienen las tradiciones?

-No solo se mantienen sino que se están recuperando. Por ejemplo la Mallega y las labores tradicionales vinculadas al pan. En agosto celebramos la fiesta de la Mallega recreando el proceso desde la recogida del cereal hasta la mallada tradicional. El Ayuntamiento colabora, pero los verdaderos artífices son los miembros de la Asociación de Cazadores de Ibias que trabajan durante todo el año para hacerla posible. Otro ejemplo son Os Reises de Tormaleo, recuperados por la Asociación TioVitan, una mascarada de invierno que recorre las aldeas de Tormaleo y Taladrid pidiendo el aguinaldo. Por otra parte, la conservación de la cultura tixileira, los tixileiros (también llamados cunqueiros) se dedicaban a la elaboración de útiles y vasijas de madera y se desplazaban por toda la península para vender su producción. Por otro lado la tradición centenaria de la elaboración del vino, la miel, el pan y la matanza con fines fundamentalmente de autoconsumo se mantienen.

-Con respecto  al turismo ¿qué atractivos ofrece Ibias?

-Visitar Ibias es como volver al pasado, a lo auténtico, a revivir la tradición. Ofrecemos senderismo, deportes en la naturaleza, caza y pesca. En Ibias se conservan elementos arquitectónicos vinculados a la miel como los ‘cortinos’ y los ‘talameiros’. Se mantienen los emparrados típicos que se pueden ver en Riodeporcos y Uría; palacios con vistas panorámicas como el de Tormaleo o el de Ron en Lagüeiro; hórreos y pallozas que conservan su cubierta vegetal. En San Antolín, la recreación de una ‘palloza’ muestra fielmente cómo eran y cómo vivían nuestros antepasados. Pueblos genuinos como Alguerdo, Morentán, Valvaler, Dou, Andeo o Pradías, cuyas casas de piedra son una muestra de arquitectura rural. La gastronomía gira en torno al cerdo: chorizos, jamones, lacones y lomos, el botelo, la cachola (cabeza de cerdo) y el caldo de nabizas o de berzas con compango. El postre tradicional son los fillolos y la rosca de Ibias. En marzo se celebran las Jornadas Gastronómicas del Cerdo.

-¿Algún proyecto en marcha?

Sí, dirigidos a potenciar el turismo, como la construcción de un área de autocaravanas en San Antolín o la firma de un convenio con la Universidad de Oviedo para llevar a cabo iniciativas como la promoción del turismo cultural, y participamos activamente en el proyecto ‘La Gran Senda del Navia’ un recorrido senderista y cicloturista a lo largo del Rio Navia. Estamos pendientes de la construcción de una senda peatonal que comunique San Antolín y Cecos, y también de la puesta en valor de los elementos de la cultura tixileira. Apostamos por la promoción turística como en ferias como Fitur, y el año pasado participamos en FETUMI (Feria del Turismo Minero). Este año estaremos presentes en la Feria de Muestras de Tineo y estamos elaborando nuevos folletos turísticos.

-¿Cuál es su próximo evento?

La fiesta del vino donde los productores locales, que hacen vino destinado al autoconsumo, elaborado a la manera tradicional de la comarca, dan a probar al público los primeros caldos tintos y blancos de la última cosecha. En esta fiesta se puede dar fe de la excepcional calidad de la uva de los viticultores de Ibias.