Asturias cuenta con 72 robots de ordeño Lely Astronaut en sus explotaciones ganaderas. Pioneras fueron en el año 2006 las ganaderías Choureiro (Navia), Peto (Tapia de Casariego) y Parlero (Valdés). En estos años la marca ha evolucionado hasta el actual Lely Astronaut A5, todo un hito en el ordeño automatizo, que recientemente ha realizado su última instalación en la ganadería Cegarito en Pola Vieja (Navia).

Desde su aparición en julio de 2018, se han instalado en Asturias 15 unidades del Astronaut A5. La ganadería Inclán (Gozón) fue la primera en España en contar con este modelo, y a ella le siguió la ganadería Xuanón de San Fructuoso, primera en el municipio de Tineo en instalarlo. También la ganadería Baldomero en El Prado (Tineo), una de las tres de la región que cuentan en la actualidad con tres robots de ordeño,  dispone de dos A4 y un A5. Ganadería Lucaria de Vega de Rey (Tineo) tiene dos A5 en su explotación, al igual que ganadería Mingón en Sabadel de Troncedo (Tineo). De un A5 disponen las ganaderías Ronderos en Valle de Tablado (Tineo); Santa Fe en Rañadorio (Tineo); Venturo en Idarga (Salas); Pilar García de San Cosme (Cudillero) y ganadería Cernuda-Vizoso en Biescas (Valdés) que cuenta con dos A5. Casa Enrique en La Ería de Cardo (Gozón) tiene también un A5, como la última adquisición de la explotación Inclán y el último que se ha instalado en la ganadería Cegarito, ganadería que dispone de dos A4 y un A5.

La fiabilidad es la característica común que todos estos ganaderos buscaban para el robot de su explotación así como la satisfacción de saber que responde a sus expectativas. “Tenemos robots con 70/72 vacas en ordeño, con más de 2.800 litros como en Venturo, Santa Fe o Xuanón y robots con vacas de más de 40 litros de media como Lucaria o Baldomero, así como dos robots en Mingón con más de 5.500 litros al día y más de 200 ordeños”, explica Alberto Sánchez, director comercial de Lely en Asturias.

A la hora de realizar una inversión en un robot de ordeño es necesario analizar todas las alternativas existentes, ya que lo importante es no equivocarse en la elección, ya que un robot va a estar en la ganadería unos 15 años. Lely dispone actualmente de la mejor máquina del mercado por fiabilidad y capacidad, es la que realiza más ordeños y tiene menos fallos.

Cuando un ganadero decide incorporar un robot de ordeño es por mejorar su calidad de vida, reducir la necesidad de mano de obra así como aumentar producción de leche y facturación al incorporar un tercer ordeño. “Para nosotros es importante que la ganadería pase a ser lo más eficiente posible, ya que creemos que el robot debe autofinanciarse, es decir, pagarse a sí mismo, la tasa de amortización de un robot de ordeño de 130.000 euros contando con bastantes extras es de cinco años, con 68/70 vacas a tres ordeños, vendiendo unos 850.000 litros de leche al año. Hablamos de una tasa de rentabilidad de un 20% a plena capacidad” afirma Alberto Sánchez. Otras ganaderías con menos animales, 50/55 vacas, simplemente buscan dejar de ordeñar, pero además van a ser más eficientes y sacar mayor rentabilidad. En esos casos lo que valoran es la fiabilidad y lo que les preocupa es que el robot no de fallos. La mejor garantía es mirar a su alrededor en la geografía asturiana dónde tienen un Lely cerca y comprobarlo. “Nosotros medimos los fallos del robot al día, por semana, al mes, o por año o años y los podemos ver en el A3, en el A4 y en el A5. Hay muchos robots desde hace 14 años. El verdadero trabajo de un robot no consiste en guiar a las vacas con tráfico forzado, consiste en atender los fallos. Los robots Lely se caracterizan por tener cero fallos o menos de 5 al día, esa es nuestra carta de presentación, el robot es una máquina muy fiable”, recalca el director comercial de la marca en Asturias.

El robot de ordeño Lely Astronaut A5 es el más vendido del mundo, supuso un aumento de ventas de un 75% para la marca con respecto al año anterior. “Se trata de los robots más vendidos en el mercado asturiano, en el español y en el mundial”, resalta Sánchez.

Un robot Lely a plena capacidad, es decir, a tres ordeños, puede realizar 200 ordeños o más diarios con el menor número de fallos. El mejor aval de Lely en Asturias es que cuentan con robots en ganaderías que llevan muchos años ordeñando. “Por ejemplo en ganadería Peto encontramos dos robots con más de 20 millones de litros ordeñados, y hablamos de Lely Astronaut A3, un robot aún vigente en el mercado con gran demanda en segunda mano que se instala actualizado. Cuando se continúa demandando es que tiene un alto valor en el mercado. Esta es una de nuestras ventajas, contar con robots de 14 años funcionando en las ganaderías asturianas”, finaliza Alberto Sánchez.