La estrategia integral contra incendios apuesta por la formación y la sensibilización

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La Estrategia integral contra incendios forestales 2020-2025 apuesta por intensificar la participación de la población del medio rural en la lucha contra el fuego, mediante la formación y la sensibilización, como principales medidas de prevención.

El gerente del Servicio de Emergencias del Principado (Sepa), Oscar Rodríguez, y el director general de Infraestructuras Rurales y Montes, Fernando Prendes, presentaron algunas de las acciones recogidas en este documento, que establece las prioridades de actuación y el calendario de aplicación hasta 2025. La estrategia pretende intensificar la cooperación y la movilización de recursos de todas las instituciones implicadas en la lucha contra el fuego.

Por su parte, el responsable del Instituto de Recursos Naturales y Ordenación del Territorio (Indurot) de la Universidad de Oviedo, Arturo Colina, ha explicado que el documento mantiene una línea continuista respecto a la anterior estrategia, aunque en esta ocasión no sólo se cuantifican económicamente las medidas que se pondrán en marcha y que movilizarán 59 millones hasta 2025, sino que se concretan en 141 acciones específicas distribuidas en 5 programas.

Otra de las novedades es que se incluyen 50 mapas para la evaluación de riesgos en el territorio y se aborda una aproximación a los incendios de interfase urbano-agrícola y forestal.

En este sentido, el gerente del Sepa, como responsable en materia de extinción, ha indicado que uno de los principales restos del organismo es “promover equipos dinámicos” que permitan actuar con eficacia ante incendios que cada vez amenazan un mayor número de núcleos rurales. En este sentido, el documento analiza la situación de determinadas áreas que han ido perdiendo población paulatinamente y cuyos habitantes tienen cada vez más edad, por lo que afrontan serias dificultades para gestionar una masa forestal que va aumentando y se aproxima a las viviendas.

Ante este contexto, la simultaneidad de grandes incendios forestales y el despoblamiento son dos de los ejes fundamentales para definir las estrategias de extinción en Asturias. Por esta razón, está previsto sensibilizar a la ciudadanía e impulsar planes de autoprotección, mediante la organización de simulacros que permitan diseñar protocolos de evacuación en núcleos de riesgo y ofrecer una respuesta eficaz ante este tipo de emergencias.

Por su parte, Fernando Prendes ha insistido en que la coordinación de esfuerzos es una “tarea indispensable” en la que profundiza la estrategia. “Invertir en prevención siempre supone un ahorro proporcional en extinción y compensación de daños, que trasciende lo económico y afecta también al terreno medioambiental”, ha subrayado. A su juicio, el fomento de una ganadería bien dimensionada, con espacios suficientes de pasto y prácticas sostenibles constituye también un elemento “imprescindible” de cara al futuro.

Estrategia Integral de Incendios Forestales 2020-2025

El plan, que apuesta por la sensibilización y formación de la ciudadanía, define cinco programas que se organizan en 15 líneas y que suman 141 acciones. Está elaborado sobre los datos provisionales disponibles en octubre de 2019 y se articula en tres apartados:

–   Análisis. Esta sección recopila las estadísticas sobre prevención, investigación, divulgación y lucha contra el fuego, al tiempo que incorpora propuestas y recomendaciones en todos estos campos.

–   Cartografía. El epígrafe incorpora 50 mapas que representan la distribución espacial de variables territoriales como la topografía, la geología, el clima, la vegetación o la recurrencia de incendios, entre otras, para la evaluación de riesgos en el territorio.

–   Diagnóstico y estrategia de actuación. Contiene las iniciativas, programas y medidas fundamentales para los próximos años, basadas en las conclusiones obtenidas en los diferentes procesos de análisis y participación pública que se han desarrollado para la redacción del documento. En este apartado también se establecen las prioridades de actuación y el calendario de aplicación, además de los objetivos e indicadores de control.