La empresa Transportes Hermanos Vallina S.L está actualmente a cargo de Rafael Vallina Fernández, tercera generación familiar en el negocio. Mantienen su sede en La Cabaña (Pola de Siero) desde hace casi 70 años cuando su abuelo Justino Vallina compró un pequeño camión para ayudar a su esposa, conocida como ‘La Ruba’ que acudía a vender fruta a los mercados además de hacer todo tipo de transportes. Sus tres hijos continuaron con el negocio, Cándido Claudio y Cándido Eusebio (tío y padre de Rafael Vallina) se encargaban del transporte de ganado y su hermana Maruja de la parte de venta de fruta. Durante muchos años se dedicaron a llevar en sus camiones terneros del Mercado de La Pola a Lérida y tras lavar y desinfectar los vehículos, el viaje de retorno lo hacían cargados de fruta. Hace 25 años con la evolución de las normativas de la época, la empresa se separó, ya que al prohibir transportar fruta en camiones de ganado, cada uno quedó con la parte que ya gestionaba.

“Los orígenes de nuestra empresa se remontan a hace casi 70 años, mi padre tiene el recuerdo de niño de ir a repartir fruta a los mercados, de acudir con un motocarro al mercado de Sama de Langreo, ya que tenían muchos clientes de la cuenca minera. Y yo mismo me acuerdo hace unos 40 años cuando marchaban cargados de terneros del mercado de La Pola los lunes para estar de vuelta con fruta y acudir al mercado de Sama los jueves cuando yo era pequeño”, rememora Rafael Vallina.

El gerente de Transportes Vallina, Rafael, relata cómo en estos años el sector se ha modernizado y recuerda cuando su padre y su tío crearon la sociedad así como con nueve años al tener los camiones en casa ya aprendió a maniobrar con ellos para prepararlos o de su primera conducción de un camión junto a su tío. Se puede decir que Rafael Vallina nació al volante de un camión. En su infancia solía ir a jugar a un viejo camión que estaba en una de sus fincas y su entretenimiento al volante era pensar que hacía viajes a Barcelona, como su padre y su tío. Y es que ya se sabe, de tal palo, tal astilla.

Actualmente la empresa polesa realiza transportes nacionales e internacionales por Europa, zona más segura que Marruecos y norte de África, lugares en los que podrían trabajar, pero según Rafael Vallina “hay muchos conflictos”. “Vamos a Dinamarca, Francia, Holanda, Bélgica, Alemania… la mayoría del ganado que se  carga en Asturias o en otros puntos de España. Ahora estamos subiendo toros a la zona de Bélgica y Holanda, y allí cargamos de retorno novillas pintas para Galicia”, explica.

Con una flota de seis camiones y 12 trabajadores, Transportes Vallina está moviendo más de 1.200 cabezas de ganado semanales. A esto habría que añadir hasta el año pasado que el primo de Rafael se independizó, cuatro camiones más que trabajaban para Central Lechera Asturiana. El Mercado de Pola de Siero siempre ha sido el punto de partida de los viajes de Transportes Vallina, “salimos lunes y jueves de aquí hacía varios puntos de España. El resto de la semana tenemos nuestros clientes y recogidas como la de Galicia para el mercado de Santiago de Compostela, que llevo haciéndola 25 años. También hacemos el mercado de Torrelavega. Somos un referente en el norte de España”, afirma Rafael Vallina.

El futuro de la empresa, con su último camión adquirido hace cinco meses, pasa por “seguir con el trabajo que nuestros antecesores comenzaron, ya que tenemos una empresa reconocida y que funciona, contando con empleados de confianza, que algunos llevan con nosotros 25 años. El objetivo es cuidar a los clientes que tenemos de toda la vida a la vez de aumentar negocio siendo competitivos”, explica Vallina.

“Hasta ahora hubo mucho trabajo, se han sacrificado en el último año muchas vacas, cualquier lunes entre agosto y casi noviembre de 2016 manejamos todas las semanas casi 500 vacas para mataderos de domingo a miércoles. Eso empieza a notarse, porque hay escasez de terneros. Actualmente tengo más trabajo fuera de Asturias, con clientes de toda la vida que traen terneros de importación. Voy de aquí a Lérida medio vacío, y cargo allí terneros para Castilla León, Toledo… Al faltar terneros del norte, vienen de Lituania, Rumanía… Como referencia decir que por ejemplo hace un año tengo cargado los jueves en mis camiones más de 1.000 terneros”, concluye Rafael.

Otro de los factores que influye notablemente al sector del transporte de ganado en España es la exportación de ganado para los países musulmanes. Aunque fueron muchos los mataderos que intentaron crear su línea de carne para exportar, las técnicas de sacrificio de los animales para los musulmanes es muy diferente a las de Europa, con lo que resulta más sencillo vender el ganado vivo. “Se están cargando barcos con ganado español que hacen una ruta por el Mediterráneo parando en varios puertos como El Cairo. Los carniceros suben, compran las cabezas que les interesan y el barco sigue ruta. Cuando el barco viene a cargar, hay mucho movimiento en el sector del transporte español de ganado”, explica Vallina.